Van regalando amores
echando
velos de escarcha
alternando
mil humores
con
la vista muy escasa.
La
cuesta del mes de enero
desliza
severos hielos.
Crujen,
frio cementerio,
lápidas
con mil desvelos.
Cantando
alegre en la ducha
silbando
como un jilguero,
aitines
en una hucha:
se
acerca el cruel febrero.
Paso
voraz disimula
mil
alientos como hilos.
Ata
el cariño tu gula:
marchitan
flores en silos.
Como
el viento alegre sople
van
recorriendo caminos
cerrando
sin sello un sobre
el
mejor de sus destinos.
Andando
corran y vuelen
con
el feliz desatino
los
que aman como suelen
mojar
el pan con el vino.
Si
en la dicha del vivir
es
el silencio el consuelo
¡vivan
marzo y abril!
Pies
que no pisan el suelo.
Gala
de polen en mayo
en
gran festín se atraganta,
sin
luz en el triste sayo
muere
el lis en la garganta.
¿Cómo
negar mil amores
cómo
os venga en gana?
Nunca
se puede decir
que
ninguna dicha es vana.